Durante el pasado fin de semana, las carreteras de Castilla-La Mancha experimentaron una preocupante actividad con la ocurrencia de 14 accidentes de tráfico que resultaron en 21 personas heridas, todas con lesiones de carácter leve. Estos datos fueron suministrados por la Dirección General de Tráfico (DGT) a través de la Delegación del Gobierno en la región, destacando una situación que si bien no culminó en desgracias mayores, sí pone de manifiesto la constante amenaza en las vías.
La provincia de Toledo fue la más afectada por los siniestros, contabilizando un total de seis accidentes que dejaron a ocho personas con heridas leves. Este número resalta en comparación con Cuenca, donde no se reportaron accidentes, demostrando una significativa disparidad en las estadísticas dentro de la misma comunidad autónoma.
Albacete tuvo registro de tres accidentes que también resultaron en tres heridos leves, una cifra que se repite en Guadalajara con tres incidentes y tres personas heridas. Ciudad Real, por su parte, reportó dos accidentes con dos heridos igualmente de consideración leve. Estas cifras, aunque menores que las de Toledo, son un claro recordatorio de la necesidad de precaución continua en todas las provincias.
En lo que respecta a las pruebas de alcoholemia, se efectuaron un total de 4.203 en toda la región durante el mencionado periodo, de las cuales 26 arrojaron resultados positivos. De estas, únicamente una correspondió a un joven menor de 25 años, mostrando un posible cambio de comportamiento en los conductores más jóvenes, aunque aún existen riesgos.
Desglosando los datos por provincias, Albacete realizó 869 pruebas de alcoholemia, con cinco resultados positivos, ninguna de ellas en menores de 25 años. Ciudad Real, con 809 pruebas realizadas, reportó cuatro positivas, nuevamente sin implicar a jóvenes. La provincia de Guadalajara se destacó por su elevado número de positivos en relación con las pruebas efectuadas, alcanzando 11 positivos de 919 pruebas, siendo uno de estos infractores un menor de 25 años. Finalmente, Toledo llevó a cabo 1.606 pruebas, de las cuales seis dieron positivo, sin involucrar a conductores jóvenes.
Este panorama de incidentes viales y pruebas de alcoholemia refleja una realidad que requiere una constante vigilancia y medidas preventivas para mejorar la seguridad en las carreteras de Castilla-La Mancha. Tanto la educación vial como los controles efectivos siguen siendo herramientas cruciales para minimizar incidentes y proteger la integridad de los conductores y peatones en la región.
Artículo publicado en : C-LM Registra 14 Accidentes Este Fin de Semana con 21 Heridos Leves Según Informes Oficiales. Enlace al artículo