La situación de varias escuelas infantiles en la provincia de Cuenca ha despertado preocupación entre la comunidad educativa y las familias de la región. La Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (CCOO) de Cuenca ha levantado la voz para denunciar lo que describen como un abandono por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha hacia estas instituciones educativas de titularidad autonómica. Las escuelas afectadas son «Cascabel» de Cuenca, «Nuestra Señora de Riánsares» de Tarancón, «Platero» de Pedroñeras y «Sagrada Familia» de Quintanar del Rey, que atienden a más de 200 niños de 0 a 3 años.
Según el sindicato, estas escuelas se ven enfrentando a una serie de problemas derivados de la falta de atención y recursos proporcionados por las autoridades regionales. Entre las principales preocupaciones se encuentra la falta de inversiones necesarias para garantizar el mantenimiento adecuado de las instalaciones, así como la insuficiencia de personal cualificado. Esta situación ha generado alarma entre las familias, que temen una mayor deterioro del servicio educativo si no se toman medidas pertinentes.
La protección y mejora de las etapas educativas tempranas es un tema fundamental para organizaciones como CCOO, que enfatizan la importancia de asegurar condiciones óptimas para el desarrollo infantil. Para el sindicato, la inversión en educación en los primeros años de vida no solo es un derecho esencial, sino también una prioridad que debe ser atendida por las autoridades competentes. De esta manera, se busca garantizar el bienestar de los más pequeños y un correcto desarrollo educativo.
Ante estas preocupaciones, se espera que los responsables de las políticas educativas de la comunidad tomen medidas y respondan a las demandas planteadas por la federación sindical a corto plazo. La comunidad está a la espera de las decisiones que puedan tomar para resolver esta situación y asegurar un futuro educativo de calidad para los niños de la región.
