Las Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha están impulsando la eliminación de barreras comerciales a nivel internacional y la apertura de nuevos mercados, en medio de las crecientes restricciones impuestas por países como China, Rusia y Estados Unidos. Esto se enmarca en una estrategia para hacer frente a los desafíos actuales y aprovechar las oportunidades surgidas del acuerdo entre la Unión Europea y Mercosur.
Ángel Villafranca, presidente de las Cooperativas Agro-alimentarias de España y Castilla-La Mancha, ha señalado la importancia de abrir nuevos mercados para el sector agroalimentario español en un contexto internacional más complejo. Destacó los beneficios del acuerdo con Mercosur, como la reducción de aranceles para productos como el aceite de oliva, el vino y el queso, aunque reconoció que sectores como el vacuno, el azúcar y el etanol enfrentarán desafíos.
A pesar de las dificultades, Villafranca instó a la cautela y a evaluar los efectos del acuerdo con optimismo, sugiriendo que la apertura a un mercado de más de 700 millones de habitantes representa una gran oportunidad. Recordó experiencias positivas de acuerdos comerciales anteriores de la Unión Europea y destacó la importancia de diversificar los mercados internacionales para fomentar el crecimiento y la competitividad del sector.
El presidente planteó la pregunta provocativa de qué hacer si se cierran las puertas de Mercosur, recordando la importancia de mantener abiertas las oportunidades comerciales para los productos europeos. En definitiva, las Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha están abogando por la eliminación de barreras y la apertura de nuevos mercados para hacer frente al proteccionismo y fomentar el desarrollo del sector agroalimentario español.