La Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha el Bono Social de Conectividad Digital, una iniciativa destinada a disminuir la brecha digital en la región. Con un presupuesto de 2,4 millones de euros, estas ayudas están dirigidas especialmente a las familias más vulnerables de la región, con el objetivo de garantizar que tengan acceso a la conectividad en sus hogares.
Ramón Pérez Tornero, delegado provincial, ha informado que las bases reguladoras de este programa ya han sido publicadas en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, y las solicitudes estarán abiertas hasta el 13 de diciembre. El bono permitirá a los beneficiarios contratar nuevos servicios de banda ancha fija o mejorar la velocidad de sus conexiones actuales, recibiendo un descuento mensual de 20 euros en la factura de telecomunicaciones durante un año.
El proceso de solicitud se realiza a través de operadores digitales colaboradores designados por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, y más información está disponible en el portal web habilitado para este fin. Además, para consultas adicionales, se puede contactar por teléfono o correo electrónico.
Esta iniciativa no solo busca facilitar el acceso a internet, sino también fomentar la inclusión digital en un mundo cada vez más conectado, asegurando que todas las familias de Castilla-La Mancha tengan acceso a las oportunidades que brinda la digitalización. Una medida importante para garantizar la igualdad de oportunidades en la sociedad actual.
