El Centro Ocupacional ‘El Picazuelo’ de Herencia ha celebrado la consolidación de un servicio de lavandería innovador que ha servido como plataforma de integración sociolaboral para sus usuarios y como apoyo eficiente a las empresas locales. Este proyecto, el cual ha sido destacado por el alcalde Sergio García-Navas y la concejal de Bienestar Social Conchi Rodríguez-Palancas durante una reciente visita, refleja el compromiso del municipio con la inclusión y el servicio comunitario.
El taller de lavandería, en funcionamiento desde hace meses, ha sido fundamental para mejorar la autonomía personal de los usuarios mientras ofrecía un servicio de calidad a entidades y particulares. Dirigido por la directora Lola Diaz-Pavón, el servicio ha ganado popularidad, especialmente entre restaurantes en búsqueda de una solución efectiva para el mantenimiento de su mantelería y particulares que requieren atención especial para su ropa de cama.
La implementación de esta iniciativa ha sido posible gracias a las subvenciones de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y los Fondos Next Generation, como parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Este enfoque progresista hacia la economía de los cuidados ha permitido que ‘El Picazuelo’ amplíe sus instalaciones y servicios, fomentando la inclusión y contribuyendo al tejido empresarial de Herencia.
Desde su apertura en octubre de 2005, ‘El Picazuelo’ ha ido creciendo en servicios y en la cantidad de usuarios que participan en su programa de capacitación laboral y desarrollo creativo. El centro acoge a personas con diversas necesidades de atención de localidades vecinas como Villafranca de los Caballeros, Puerto Lápice, Villarta de San Juan y la propia Herencia, evidenciando su alcance y la necesidad de tales servicios en la región.
Este servicio de lavandería es un ejemplo más de cómo Herencia invierte en iniciativas sostenibles que promueven la integración social y laboral, y mejora la calidad de vida de sus ciudadanos.
