El Ayuntamiento de Herencia, en Ciudad Real, ha decidido unirse a la celebración de la lluvia de estrellas de agosto, también conocida como Lágrimas de San Lorenzo. En respuesta a la petición de muchos vecinos apasionados por la astronomía, se ha tomado la decisión de apagar las luces de los molinos de la sierra de San Cristóbal con el objetivo de proporcionar un escenario ideal para contemplar este fenómeno astronómico.
La medida busca reducir la contaminación lumínica y ofrecer un cielo más puro y estrellado para el disfrute de todos los asistentes. La región de La Mancha en España es conocida por sus cielos despejados y sus zonas con poca contaminación lumínica, lo que la convierte en un lugar ideal para la observación de las estrellas, la Vía Láctea y las estrellas fugaces.
Dentro de esta región, Herencia destaca como un lugar privilegiado para esta actividad gracias a sus sierras y parajes naturales como el Pozo del Agua y El Navajo. Desde el Ayuntamiento, se invita a todos los ciudadanos y visitantes a formar parte de esta mágica noche y sumergirse en la inmensidad del cosmos.
Es una oportunidad única para apreciar la majestuosidad del universo desde un entorno natural y privilegiado. La noticia fue publicada en el diario online «Herencia (Ciudad Real). Diario de información en el corazón de la Mancha» y se puede obtener más información en su página web.
