El exalcalde de Fontanar, Víctor San Vidal, se encuentra en medio de un juicio por supuesta malversación y otras irregularidades durante su mandato. En la última sesión en la Audiencia Provincial de Guadalajara, se han presentado testimonios de testigos y expertos, incluyendo agentes de la Guardia Civil, quienes han detallado las presuntas actividades ilícitas llevadas a cabo en el Ayuntamiento.
A pesar de los informes policiales que señalan irregularidades significativas, el caso se complica debido a que los peritos no han podido justificar completamente el incremento patrimonial encontrado en las cuentas del exalcalde. Este aspecto es crucial, ya que pone en duda la solidez de las pruebas presentadas en el tribunal. Se han destacado pagos no justificados y facturas anómalas que suman al menos 6.901,81 euros entre 2015 y 2019.
San Vidal renunció a su cargo después de un escándalo donde se le escuchó descalificar a una empleada municipal. Ahora se enfrenta a cargos junto con otras cuatro personas, incluyendo el director del Centro de Formación y Vivero de Empresas, la secretaria interventora del Ayuntamiento, y una madre e hijo relacionados con Protección Civil. Las penas solicitadas por la fiscalía van desde dos años y medio hasta cinco años de prisión.
El juicio también ha revelado problemas en la gestión de subvenciones para cursos que nunca se llevaron a cabo según testigos. Las listas de asistentes incluyeron nombres de familiares de los acusados, lo que pone en entredicho la legitimidad de los cursos.
La defensa de San Vidal ha cuestionado la credibilidad de las pruebas periciales, argumentando que algunos informes carecían de verificación adecuada. Su testimonio ante el tribunal, programado para mañana, podría cambiar el rumbo del caso. El resto de los acusados comparecerán el lunes. Se espera que la continuación del juicio revele nuevos detalles y posiblemente cambios en este complejo caso judicial.
