La delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, ha anunciado el inicio inminente de la reforma del emblemático edificio de la Delegación del Gobierno en Toledo. Este proyecto de renovación, que cuenta con un presupuesto cercano a los diez millones de euros, tiene como objetivo proteger el patrimonio arquitectónico del edificio y llevarse a cabo bajo estrictos criterios de sostenibilidad y eficiencia energética.
La obra ha sido encargada a la Sociedad Mercantil Estatal de Gestión Inmobiliaria del Patrimonio, bajo la supervisión del Ministerio de Política Territorial. Los arquitectos Jesús Martín del Vaz y Marina Alonso Aguirre son los responsables del diseño del proyecto, el cual fue adjudicado por un importe de 9,7 millones de euros como parte del Plan de Rehabilitación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea.
El edificio, construido en los años 40 del siglo XX y que no ha experimentado reformas significativas desde entonces, sufrirá una rehabilitación integral para abordar la obsolescencia de las instalaciones, actualizar la normativa de protección contra incendios y mejorar la funcionalidad de los espacios para trabajadores y visitantes. Se conservarán las fachadas y otros elementos característicos, mientras que la estructura interior será demolida para permitir una distribución optimizada que maximice la entrada de luz natural.
Además, se pondrá en valor los restos arqueológicos romanos e islámicos que alberga la estructura, y se realizarán mejoras en la envolvente del edificio para mejorar su rendimiento energético. Durante las obras, las oficinas de la Delegación del Gobierno se trasladarán a diversos inmuebles de la Administración General del Estado en Toledo, con la sede institucional ubicándose en la Plaza de San Vicente.
A pesar de las obras, las celebraciones tradicionales, como el Corpus Christi, se llevarán a cabo sin inconvenientes en la Plaza de Zocodover, tras garantizar su desarrollo normal durante el proceso de remodelación en reuniones con las autoridades locales.
Este ambicioso proyecto de reforma, que se estima tomará aproximadamente dos años, representa un importante paso en la protección y puesta en valor del patrimonio arquitectónico de la Delegación del Gobierno en Toledo.
