El Ayuntamiento de Ciudad Real ha decretado un día de luto oficial por el fallecimiento a los 73 años del exalcalde Francisco Gil-Ortega, quien gobernó la ciudad entre 1995 y 2007 por el Partido Popular. Gil-Ortega fue reconocido por su compromiso con su tierra y la defensa de los intereses de la ciudad. Durante su mandato, se destacó por transformar y dejar su impronta en la ciudad. El actual alcalde, Francisco Cañizares, tuvo palabras de cariño para la familia de Gil-Ortega en una sesión extraordinaria convocada para decretar un día de luto oficial. Las banderas ubicadas en los edificios municipales ondearán a media asta en señal de duelo. Gil-Ortega falleció debido a un problema cardiovascular repentino. La capilla ardiente se instalará en la parroquia de San Pablo y el funeral se celebrará el miércoles, seguido de la inhumación en Arenas de San Juan. Gil-Ortega fue reconocido como un gran alcalde que hizo historia en Ciudad Real, y se destacó por ser trabajador incansable y estar cerca de la gente. Tras retirarse de la política, se dedicó a su familia y a su patrimonio. El Partido Socialista expresó sus condolencias a la familia y destacó la dedicación de Gil-Ortega a la ciudad y a la vida pública. Gil-Ortega también fue senador, presidente del PP y vicepresidente de la Mesa de las Cortes de Castilla-La Mancha.
La Ciudad Real declara un día de luto oficial en honor a la memoria del «ilustre alcalde» Francisco Gil-Ortega.
