La catedral de la Virgen del Prado en Ciudad Real ha abierto sus puertas en vísperas del día de San Lorenzo para recibir a cientos de feligreses y dar comienzo a las fiestas de la ciudad. Como es tradición cada 9 de agosto, la imagen de la patrona ha descendido del camarín hasta el altar mayor al atardecer, pero este año no subirá al palio como de costumbre, sino que se quedará a los pies del altar para estar más cerca de los creyentes. La Hermandad de la Virgen del Prado calcula que durante este corto periodo de tiempo, entre 20.000 y 25.000 personas se acercarán a la catedral para ver a la patrona. Los fieles han depositado sus rezos, peticiones y flores a los pies de la Virgen. Además, el Pandorgo 2023 ha participado en la bajada de la imagen y ha declarado que este día quedará grabado en su memoria. La Virgen del Prado llevará el manto de la coronación hasta el día 12 y luego lucirá el manto de los dragones, regalado por los Condes de la Cañada en 1923 debido al centenario. La hermandad ha animado a los ciudadrealeños a recibir a la Virgen con alegría y fraternidad.
La Virgen del Prado está más accesible para los feligreses que nunca
