El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha anunciado con entusiasmo que la ciudad se convertirá en la sede del Centro de Estudios Penitenciarios, en un acto que ha contado con la presencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Las obras del edificio que albergará todas las instalaciones para la formación de los funcionarios de Prisiones ya han comenzado, marcando un hito importante para la ciudad.
Desde que se conoció la noticia de que Cuenca sería la sede de este recurso, se ha notado un impulso significativo en la economía local. El alcalde ha destacado que cerca de 3.000 personas han pasado por la ciudad para recibir formación, y se espera que otras 1.000 comiencen pronto. Esta afluencia de personas ha tenido un impacto positivo en la vida cotidiana de Cuenca, ya que «conviven en la ciudad y eso se nota en nuestras calles», según Dolz.
El proyecto del Centro de Estudios Penitenciarios es el resultado de una colaboración entre diferentes administraciones, incluyendo el Ayuntamiento de Cuenca, la Diputación Provincial, la Junta de Comunidades y el Gobierno de España, así como la Universidad de Castilla-La Mancha, que ha facilitado las instalaciones para la formación hasta la finalización de las obras del nuevo edificio.
El alcalde ha agradecido al ministro Grande-Marlaska por confiar en el potencial de Cuenca y ha destacado que esta inversión, junto con la construcción de la nueva Comisaría de Policía Nacional, representan las inversiones más importantes del Gobierno de España en la ciudad. El nuevo edificio será moderno, sostenible y contará con espacios diseñados específicamente para la formación integral del personal penitenciario.
El acto de inicio de las obras ha contado con la presencia de diversas autoridades nacionales, regionales y locales, resaltando la importancia y el apoyo que ha recibido el proyecto. En definitiva, la sede del Centro de Estudios Penitenciarios en Cuenca promete ser un importante revulsivo para la ciudad y contribuirá significativamente a su desarrollo.
