Estos controles policiales tienen como objetivo prevenir que personas que han bebido o consumido drogas circulen por las calles conquenses, pues las estadísticas indican que un aumento del número de estas campañas de vigilancia lleva aparejado una reducción en el número de accidentes con víctimas.
Desde la DGT se advierte de que, a medida que la concentración de alcohol en la sangre aumenta en el conductor, la tasa de incidencia de accidentes también se incrementa, además que este suceso se vuelve más grave; y añade que, aun con tasas de alcoholemia dentro de los márgenes legales permitidos, el nivel de riesgo de accidente de tráfico puede verse incrementado, y que la única tasa segura es 0,0%.